Internacionales

18/Feb
/2015

Testigo ratificaría todo en la Justicia, pero tiene miedo

Natalia Fernández ratificó la historia que había contado a Clarín, sobre las irregularidades que vio en el primer operativo judicial realizado en la casa de Nisman.

Denunció irregularidades varias

Denunció irregularidades varias

(Argentina/Clarin) Monte Carlo/MP

Según contó a Clarín, Natalia y una compañera de trabajo fueron interceptadas por un móvil de Prefectura a varias cuadras del departamento de Nisman de Puerto Madero, aquella madrugada del lunes 19 de enero. Las dos salían de trabajar en el restorán, donde ella es camarera, y su amiga recepcionista. “No es mi intención ser partícipe de esto, estoy acá porque no tuve suerte esa noche”, dijo ayer, “no es ningún cuento de fantasía”, apuntó contestándole a Fein quien había tildado su relato de “descabellado”. Y agregó: “Lo que conté es lo que viví, lo que vi, es la verdad”.

En su entrevista con Clarín, Natalia aclaró que no tenía conocimientos técnicos o científicos de las situaciones que vivió pero que algunas le indignaban. Por empezar, habló de la forma en que las abordaron para ser testigos a la una de la mañana, desde un móvil cuyos tripulantes les pidieron los documentos, les preguntaron si estaban drogadas o alcoholizadas. “Disculpame, le pregunté a un policía cuando llegué al edificio. Disculpame, ¿mataron a Madonna, o a quién? ¿Murió Britney (por la cantante Britney Spears)?”, recuerda Natalia que le preguntó a un oficial. “Y un policía me dijo que había muerto Nisman. Son sólo quince minutos, no te va a llevar más que eso, me dijo”. No sería así.

Ya en el piso 13, a Natalia la dejaron esperando en el hall de la entrada de servicio del departamento del fallecido fiscal, de donde dice haber visto el cuerpo de Nisman, al que quisieron sacar en camilla y envuelto en una “bolsa”. Pero que después lo entraron y lo sacaron por otra puerta. Dice haber escuchado todo el tiempo el ruido como de una aspiradora y que sacaron luego un aparato “grande”.

Una vez adentro, afirmó haber visto que subrayaban con marcadores los papeles del fiscal, que peritos científicos separaron el celular de Nisman y que una agente lo tomó con las manos – y sin guantes– intentando atender la catarata de llamados.

También refirió –aunque reconociendo la incapacidad de distinguir una bala de su vaina– que Fein apareció con una bolsa diciendo que adentro tenía “cinco casquillos”. Natalia afirmó que el portero de Nisman le ofreció café de la cafetera de la casa, en medio de un clima de risas, y “cincuenta personas”. Como hacía rato que había pedido ir al baño, la dejaron usar uno de los sanitarios de la casa, y que al final de la larga jornada, poco antes de las 9 de la mañana, los empleados tomaban mate y pidieron medialunas. Remató con que la hicieron firmar papeles que nunca pudo leer.

En la entrevista radial, habló reiteradamente sobre sus temores. Aseguró haber recibido “llamados extraños” e incluso la visita de dos hombres, de unos 40 años en el restaurante sobre Alicia Moreau de Justo donde trabaja. “¿Vos sos Natalia, la testigo del caso Nisman?”, contó que le preguntaron.

 

Foto: Clarin

Titulares por email