Aylwin, electo presidente para suceder a Pinochet a partir del 11 de marzo de 1990, murió en compañía de su familia, en su casa, después de semanas de agonía.
"Chile ha perdido a un gran demócrata", destacó la presidenta chilena Michelle Bachelet, inmediatamente después de que se confirmó el fallecimiento del líder político, activo hasta hace pocas semanas.
El gobierno decretó tres días de duelo oficial en honor al exmandatario, que gobernó los primeros cuatro años de la transición política chilena, mientras se preparaba un funeral de Estado para despedirlo, confirmó Bachelet, que anunció que se trasladaría hasta su casa para entregarle el pésame a su familia.
AFP
Titulares por email