El gobierno había anunciado que el sector volvería a trabajar a partir del lunes 13, pero el sindicato consideraba que aún no estaban dadas todas las condiciones.
La Cámara de la Construcción y el Sindicato Único Nacional de la Construcción y Anexos (Sunca) se reunieron el viernes y no llegaron a una solución.
Este sábado continuaron las negociaciones y finalmente se arribó a un acuerdo.
El ministro de Trabajo y Seguridad Social, Pablo Mieres, informó que "la construcción vuelve a trabajar pero en condiciones de alta responsabilidad por la preocupación sanitaria".
Indicó que los lugares de trabajo se adecuarán a las "nuevas exigencias".
Por ejemplo, habrá tapabocas en las obras, y en los vehículos que trasladen a los empleados se deberá ocupar la mitad de los asientos.
Por otra parte, empresarios y trabajadores del sector aportarán a un fondo para subsidiar a quienes no puedan trabajar por padecer patologías que los hagan más vulnerables a la covid-19.
De esta forma 45 mil trabajadores volverán a las obras en la fecha prevista, tras dos semanas de licencia especial y una de licencia reglamentaria.
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