Las nuevas medidas implican que la gran mayoría de las compañías no podrá acceder a dólares con una paridad de 70 pesos argentinos para cancelar sus importaciones, sino que deberán recurrir a sus ahorros o a los mercados alternativos en los que el dólar cotiza en torno a los 110 pesos argentinos.
La decisión del gobierno de Alberto Fernández se debe a la pérdida de reservas del Banco Central.
Aishemberg agregó que el comercio con Argentina cayó un 20% desde hace un año, por lo que habrá que buscar alternativas para paliar esa situación, que calificó de "complicada".
Foto: Presidencia, archivo.
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