13/May/2022 Nahomi Que horror, pobre los menores y sus familias. Es un caso gravísimo. Pagar por sexo a menores y suministrarles estupifacientes ( porqué eso dice las acusaciones) acusados por delito de retribución y/o promesa para actos sexuales o eróticos. También suministro de estupifacientes. También hay cargos de proxenetismo y pornografía infantil. Esos crímenes deben ser condenados según la ONU / Unicef ( con penas de 10 a 20 años de prisión) nosotros como sociedad, nos quedamos cortos. Porqué estamos tolerando, estos crímenes que dejan secuelas muy serias en el desarrollo psicoemocional y cognitivo, de nuestros niños, niñas y adolescentes. Hasta cuándo las penas tan suaves a personas que hacen daño y que no miden, ni el sexo, ni la nacionalidad, ni la edad. Es un guiño a la trata de personas y más al tráfico de millones de menores de edad, en el mundo.