Las carreras de perros son una actividad que se desarrolla en el marco de la ilegalidad, provocan el sufrimiento de los animales y promueven las apuestas clandestinas.
El texto también señala que los animales son sometidos a un entrenamiento feroz, que incluye la utilización de drogas y esteroides, y que terminan en el abandono o la muerte cuando los resultados en la competencia no son los esperados por sus tenedores.
Se agrega, además, que la Secretaría Nacional del Deporte determinó que las carreras de perros no son una práctica deportiva, ya que uno de los elementos que determinan que lo sean es que tenga como protagonista al ser humano, aunque sea como conductor de un animal, lo cual, en este caso, no se cumple.
Titulares por email