La figura de Valverde sale reforzada del gran clásico en el que el Real Madrid levantó el vuelo. Su patrón de futbolista responde a los nuevos tiempos que mandan en el fútbol. Puro físico con amplio recorrido. Con fuerza para ser el hombre del centro del campo que salta a la presión arriba con Karim Benzema, aportar recuperación de pelota ocupando mucho terreno y llegada por sorpresa desde segunda línea.
Así aprovechó el espacio que generó Marco Asensio con su arrastre de rivales y el pase de Benzema, antes de ponerle pausa a una definición perfecta en carrera a los 5 minutos de partido. En un día clave Fede lo dio todo hasta que no pudo más y se marchó del terreno de juego extasiado, con mareos, cuando dejó su sitio a los 69 minutos a Luka Modric.
Valverde es el noveno uruguayo que defiende el Real Madrid, el quinto que disputa un clásico y pasa a la historia por ser el primero que marca un gol. José Santamaría llegó a jugar 23 enfrentamientos ante el eterno rival. El defensa nunca convirtió.
Fede suma 76 partidos de madridista, segundo jugador nacido en Uruguay con más partidos en el Real Madrid pero muy lejos de los 337 que jugó Santamaría. Pero en su quinto clásico, el tercero de titular, ya dejó huella con su gol. Es su cuarto tanto en Primera.
Por detrás deja a compatriotas como Pablo García, Diogo, que también marcó al Barcelona pero jugando en el Real Zaragoza, o Sergio Rodríguez que hizo lo mismo con el Málaga y Hércules pero de madridista jugó un clásico sin gol.
Otros uruguayos que llegaron a defender al Real Madrid pero no se estrenaron en un clásico fueron Héctor Ramos, Julio César Britos, Juan Alberto Acosta y Gary Kagelmacher.
Datos y foto: EFE
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