En tanto, las autoridades de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) buscan modificar los protocolos sanitarios ante la nueva coyuntura epidemiológica nacional, consignó El País.
Actualmente en los salones de clase los estudiantes deben situarse a un metro de distancia. A partir de segundo grado de liceos y UTU, esa distancia incluso se incrementa a un metro y medio si el departamento en el que está la institución está en riesgo naranja o rojo siguiendo la clasificación de Harvard.
La disposición vigente rige en el artículo 7 del protocolo sanitario, pero ha dificultado la concurrencia masiva a las aulas.
La ANEP, a través del presidente Robert Silva, consultó al Ministerio de Salud Pública la viabilidad de flexibilizar la distancia obligatoria.
Las autoridades educativas buscan que aquellos centros que puedan mantener el distanciamiento lo seguirán haciendo. Pero en el resto se pretende flexibilizar a cambio de apuntalar otras medidas de protección: el uso de tapaboca, recreos escalonado, y ventilación de los salones, indicó el matutino.
Foto: Presidencia
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